El partido de los mil días y horarios dejó una sonrisa para todos los que estuvieron involucrados directa o indirectamente en él. San Lorenzo consiguió el puntito que le servía para clasificarse en la próxima Copa Sudamericana, pero resignó sus mínimas chances de seguir con esperanza de pelear el título. La visita, que tenía en su poder la oportunidad de decretar esta misma fecha el descenso de Independiente (estuvo a media hora de lograrlo) y además dejar último a Boca, se enamoró de ese punto que realmente verá su valor cuando finalice el campeonato, aunque mientras tanto lo deje arriba de los sanjuaninos y a seis del “Rojo” faltando dos fechas.
Desde un primer momento las intenciones de los equipos se vieron muy claras. El equipo de Pizzi dominaba con la tenencia del balón pero sus intenciones morían en el borde del área, allí, la línea de cuatro defensores de la visita destruían las pocas ideas del local. Los de La Paternal esperaban para luego salir de contra y tener alguna chance clara. Y esa chance llegó a los 25´, con a primera aproximación concreta hacia el arco de Ibáñez: Santiago Nahuel se escapó desde el medio hacia el costado derecho para mandar el centro en el que el ex arquero de Olimpo se pasó y por el fondo Lucas Rodríguez sólo la tuvo que empujar para poner en ventaja a la visita, y, en esos instantes, mandar al descenso a Independiente.
En la jugada posterior al gol, Mercier hizo lucir a Nereo Fernández cuando sacó por arriba el remate desde lejos del volante. San Lorenzo fue solamente tiros de media distancia, más alguna jugada esporádica que no hacían traspirar de más a la gente de Argentinos.
En la segunda parte San Lorenzo fue decidido a buscarlo desde el vamos, Alan Ruiz y Bordagaray ingresaron en lugar de Kalinski y Prósperi, para darle ésa puntada final que necesitaba el equipo en los últimos metros. El delantero casi hace cumplir la ley del ex con un cabezazo suyo que se fue por arriba del travesaño, pero a los 12’, el pibe Correa se tenía guardada una joyita: fue por el límite del área grande de derecha a izquierda, dejando a cuatro jugadores de Argentinos desparramados para luego definir suave junto a un palo haciendo inútil la salida Nereo.
Con el empate San Lorenzo fue de mayor a menor y tuvo una clara con Alan Ruiz que se fue junto a un palo, Argentinos, una aproximación con Leandro Caruso que se fue con pelota y todo para afuera. Con el correr de los minutos los dos se encariñaron con el punto y dejaron a casi todos contentos.
Por Carlos Souto @carlossouto11
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