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15 octubre 2013

Instituto dio vuelta el marcador y se llevó la victoria ante Talleres.

Instituto volvió a dar vuelta un resultado. Si, como en las últimas dos fechas anteriores (ante Villa San Carlos y Sarmiento), el conjunto albirrojo volvió a torcer una historia que no venía bien. Sin embargo, esta vez es especial porque fue en el clásico ante Talleres. Por ello, este encuentro será recordado por todos los hinchas de los dos clubes: por los que estaban adentro del estadio Mario Alberto Kempes, por los que lo miraron por televisión y por los que lo escucharon en la radio. Ramón Abila y Lucas Godoy, fueron los verdugos, de una tarde que estaba pintada de azul y blanco y que al final, se tiñò de rojo y blanco. Abrió la cuenta, el defensor Avendaño para los locales y en el segundo tiempo, Abila y Godoy pusieron las cifras definitivas: 2 a 1.

En el primer tiempo, el equipo dirigido por Elvio Agüero comenzó a manejar el balón y a crear situaciones de riesgo. Ya desde el arranque, mostró las credenciales suficientes para imponer las condiciones de quien iba a controlar el desarrollo. El delantero Abila, se mostró siempre como una carta importante para intentar sorprender dentro del área. Otro futbolista que siempre buscó asociarse y elaborar jugadas de ataque, fue Federico Vismara, quien le dio claridad y precisión al mediocampo. ¿Talleres? Se vio sorprendido por la propuesta de la visita, entonces decidió cederle la iniciativa y luchar palmo a palmo en su propio campo. Entonces, el cuadro de Alta Córdoba aceptó esas condiciones y continuó controlando el balón.

A pesar de ese dominio en el juego, no se reflejó en el resultado, ya que en algunas ocasiones le faltço precisión en los últimos metros. Parecía que Instituto iba a convertir el primer gol, por la propuesta que mostraba. Sin embargo, el equipo que sorprendió a todos, fue la alineación de Arnaldo Sialle, puesto que, Avendaño, le pidió prestado el cartucho de goles a Gonzalo Klusener, y abrió el marcador en la primera parte. Con la apertura del marcador, Instituto se sintió tocado en su orgullo e intentó irse al descanso del primer tiempo, con la igualdad. Pese al esfuerzo, no pudo conseguirlo y la formación local, se fue feliz con la ventaja: 1 a 0.

En el complemento, Talleres prosiguió utilizando el esquema que le había dado buenos dividendos: dejar que el combinado albirrojo controle el esférico y aprovechar algún contraataque. Esa idea fue la desplegó en el terreno de juego y por ello pasó más de un sobresalto. La escuadra de Alta Córdoba elaboró distintas ocasiones de riesgo durante la segunda parte, pero en algunas de ellas, carecía de justeza a la hora de definir. En cambio, en otras oportunidades, el arquero Santillo mostraba seguridad en el arco. No obstante, como un león herido, continuó atacando y a l final, tuvo su premio. En el día de su cumpleaños, Ramón
Abila, no quería terminarlo con una tristeza, por ello, con la frialdad de todo goleador, convirtió el gol del empate: 1 a 1.

La igualdad, era justa por todo lo que mostró Instituto en la cancha. Luego del 1 a 1, el cuadro local se paró unos metros más adelante para disputarle el balón, por ello, el partido se emparejo un poco. A pesar de ello, Instituto no dudó en su plan y cuando tenía la pelota, buscaba llegar con peligro. El encuentro se hizo emotivo, sobre todo en los últimos minutos, porque Juan Ignacio Sánchez Sotelo, como esos delanteros que no tienen una buena tarde, pero que en un instante, se iluminan, sorprendió con un remate, pero la pelota pegó en el palo. Todos se quedaron sorprendidos con el disparo, con una sensación agridulce. No obstante, esa sensación se transformó en tristeza y en enojo, porque en un contragolpe punzante, Lucas Godoy, fue más preciso y anotó el 2 a 1, final.

El juvenil delantero, quería convertirse por varios días en el héroe de la jornada, y en esa jugada, con toda la desfachatez, marcó el gol del triunfo. Todos los hinchas de Talleres cuando vieron la definición habrán recordado que Godoy jugó allí y más de uno habrá pensado en la famosa “ley del ex”. Algunos hinchas de Instituto creerán que ese dicho futbolero se hizo presente en el Mario Alberto Kempes, sin embargo, hubo una virtud en el atacante, quien aprovechó el momento desafortunado (por el tiro de Sánchez Sotelo en el otro arco). Por estos condimentos en el final y sobre todo porque es ante el clásico rival, Instituto se retiró feliz. Además, sabe que si sigue por este camino, seguirá escalando posiciones hasta arribar a los primeros puestos. Para el conjunto de Sialle, todo es tristeza y enojo por lo que ocurrió sobre el final. Sin embargo, sabe que ayer no jugó bien, porque le cedió la iniciativa al rival. Talleres es un equipo agresivo en ataque y ayer esa característica no apareció. Si recupera esa fórmula, volverá a ser un conjunto fuerte.

TALLERES (1): Pablo Santillo; Rodrigo Cháves, Juan Pablo Avendaño, Renzo Vera y Elías Bazzi; Marcelo Vega, Nery Leyes, Marcos Brítez Ojeda y Elvio Fredrich; Juan Sánchez Sotelo y Gonzalo Klusener. DT: Arnaldo Sialle. 

INSTITUTO (2): Julio Chiarini; Raúl Damiani, Pablo Frontini, Pablo De Miranda y Nicolás Dematei; Federico Vismara y Fernando De la Fuente; Emiliano Tellechea, Lucas Favalli y Sebastián Ereros; Ramón Ábila. DT: Elvio Agüero. 

Goles: Avendaño (27 minutos para Talleres), Ábila (64 minutos para Instituto) y Godoy (91 minutos para Instituto). Amonestados: 16 min Ereros (I). 2 segundos (segundo ttempo) De la Fuente. 64 min Abila (I). Cambios en Talleres: Trulls por Vera (lesionado), Carabajal por Fredrich y Díaz por Vega. Cambios en Instituto: Burzio por Favalli y Lastra por Tellechea y Godoy por Ereros. Árbitro: Alejandro Castro (regular). Cancha: Mario Alberto Kempes.

Por Diego Bentivegna @bentidiego

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