Por Lucas Abbruzzese@LucasAbbruzzese
Newell´s Old Boys de Rosario perdió en el estadio Marcelo Bielsa por 2 a 1 contra All Boys por la décimo sexta fecha del Torneo Inicial.
Fue de esas noches negras y que la suerte, eso tan necesario en cualquier ámbito de la vida, no estuvo del lado leproso. Lesionados, técnico expulsado, pérdida de invicto y seguir a tres del líder. Si se lo mira por estos lados, el partido fue para el olvido. Pero si se analiza desde que el elenco rosarino no mereció perder porque generó más chances del rival, tuvo más la pelota (no la administró correctamente) y fue protagonista del cotejo.
Con esta derrota, los dirigidos por Gerardo Martino perdieron el invicto que llevaban en este certamen y perdieron la oportunidad de alcanzar en la cima de la tabla de posiciones a Vélez, ya que perdió contra Boca por 1 a 0. Encima, la Lepra hace 4 encuentros que no gana y, para peor, no logra imponer su filosofía de juego. ¿Le está pesando estar peleando el torneo en la recta final?
El inicio del cotejo se atrasó 15 minutos por los incidentes en el partido de Colón vs. Unión. Previo al pitido inicial del árbitro Diego Ceballos, hubo 60 segundos de silencio por los accidentes de tránsito. Así, en un Coloso repleto, se empezó a disputar el primer tiempo, el cual dejó en claro que a veces el azar juega un papel fundamental en el fútbol.
El elenco de Floresta propuso algo claro y que pareció impenetrable para el rojinegro: nunca atacó con más de 4 futbolistas. Al recuperar la redonda, a los dos delanteros y el enganche se le sumaba uno de los tres volantes y los restantes aguardaban en zona defensiva junto al póker de defensores, quienes jamás pasaron al ataque. ¿Hasta cuándo estos planteos amarretes en el fútbol argentino? ¿Por qué no tratar de juntar gente en ataque, tener la pelota y buscar peligro en el arco rival?
Una de las claves de todo el encuentro pasó por la no recuperación rápida de la pelota por parte de Newell´s, que sufrió por la banda izquierda la explosividad de Juan Pablo Rodríguez, cuya importancia fue tanta que gestó el córner por el cual Jonathan Ferrari cabeceó a los 11´ para poner el 1 a 0 (es la segunda vez que el leproso se encuentra abajo en el marcados. La otra fue con River). Previo a esto, el lateral derecho del local, Marcos Cáceres, tuvo un remate de cabeza claro que se fue al lado del palo y Leonel Vangioni, el marcador de punta izquierdo, le pegó de sobre pique a las manos del portero del Albo. El equipo que hoy fue local tenía la pelota pero no era claro. Pese a esto, llegaba con peligro al área rival, donde no tuvo fina la puntería. Hasta el central Santiago Vergini tuvo su chance cuando Ignacio Scocco se la bajó y remató con la derecha, su pierna menos hábil, afuera. Un cabezazo de Mauricio Sperduti al palo y un remate de
Pérez que salvó un defensor de All Boys fue lo que quedó del primer tiempo, en el cual Newell´s no mereció irse perdiendo. Además, perdió por lesión a Maximiliano Rodríguez y a Gabriel Heinze.
El complemento, donde también se lesionó Lucas Bernardi, fue más aburrido, con escasas situaciones de gol y prácticamente se llevó a cabo en campo de los de Floresta. A los 2´ Cáceres (fue amonestado, llegó la quinta amarilla y se perderá el próximo compromiso) sacó un bombazo a las manos de Nicolás Cambiasso y minutos posteriores Scocco se sacó dos rivales de encima y disparó por encima del travesaño. Las jugadas individuales parecían la única manera para empatar el encuentro. Víctor Figueroa, en esta faceta, se mostró como el mejor por su desequilibrio. Y a los 28´ se produce la jugada más relevante del partido cuando Nahuel Guzmán, arquero de Newell´s, primero cortó una corta que era gol, luego salió jugando, la regaló y le cometió penal a Rodríguez. Muchas situaciones en pocos segundos. Errores y aciertos en una sola jugada. La pena máxima fue cambiada por gol por Mauro Matos. 2 a 0.
A 10´ del final, producto del nerviosismo y algún mal gesto por parte de los visitantes, se fueron expulsados Martino y su ayudante Jorge Pautasso. Pérez logró descontar a los 45´ y, durante los 7 minutos que adicionó Ceballos, todo era pelotazos para buscar el empate, el cual nunca llegó y el invicto se cortó. A Newell´s paciencia no le faltó, pero, tal como viene sucediendo hace bastantes fechas, se ausentó la triangulación, el juntarse, la picardía y la dinámica. Todo pareció muy previsible por parte de los rosarinos, que sin embargo siguen a tres unidades de la punta a falta de tres fechas para el final del Torneo Inicial. La líneas nunca estuvieron conectadas y deberá trabajar mucho si quiere seguir peleando el certamen hasta el final.
Párrafo aparte para el mediocampista central Hernán Villalba, quien cada partido que pasa demuestra su gran nivel y lo importante que es para sus compañeros. El volante se encarga de los relevos, de los cuales los cumple perfectamente, y de robar y dar redonda la pelota. Fundamental su tarea, cuyas consecuencias son el lucimiento de otros futbolistas.
Ahora habrá toda una semana para preparar el encuentro contra Unión del sábado. ¿Recuperará el nivel? ¿Cómo estarán los referentes lesionados? ¿Los entrenados por Martino se mostrarán a la altura de las circunstancias para coronarse campeón? El mejor equipo del torneo viene bajando su nivel, pero su filosofía no la pierde, algo para destacar en este fútbol argentino tan amarrete.