Mucho se habló del deficiente operativo de seguridad que
brindó la policía rosarina en el encuentro del sábado pasado por la
B Nacional0
a 0 entre el 1° y el 2° del torneo, se comenzaron a
escuchar las quejas de los hinchas millonarios por los maltratos que sufrieron
de los simpatizantes locales ante la pasividad de la policía y de parte de la
fuerza de seguridad.
Francisco Baya Casal, socio de River, fue uno de los pocos
afortunados que consiguió entrada para ver el partido, y nos contó lo que vivió
el sábado.
El viaje de ida ya fue caótico para los hinchas millonarios,
ya que en plena ruta fueron parados 10 micros por la policía rosarina, horas
antes del encuentro, y demorados sin ningún tipo de explicación, por lo que se
perdieron el partido. Francisco no corrió esa suerte: “Llegué a Rosario el
viernes y me fui el domingo”. De todas
maneras, la entrada al estadio si fue problemática: “Dejamos el auto en Alto Rosario
Shopping y caminamos hacia la cancha. Consultamos y nos dijeron que fuéramos
por Avellaneda Bis y que doblemos en Almafuerte […] y ahí estaba toda la gente
de River. Ese trayecto lo hicimos entre toda la gente de Central”, protesta
Francisco dejando entrever la primera deficiencia del operativo de seguridad. “Por
suerte teníamos abrigo y con eso no se veía nuestras camisetas de River, pero
un par de personas un poco exaltadas notaron que no éramos de Central e
insultaron”, apuntó.
Francisco destaca que en el ingreso al Gigante de Arroyito
no tuvo inconvenientes, pero notó que había más gente de la que podía haber de
acuerdo al espacio. Esto tiene una explicación, que remarca nuevamente las
fallas del operativo: “Nos encontramos con varias personas que se habían ido a
la popular porque en la platea les tiraban de todo de arriba y ambos costados,
por supuesto sin ningún accionar de la policía”. Esta agresión la volvieron a
sufrir durante el entretiempo, lo que obligó a estirar este período hasta los
22 minutos.
“La salida fue con todo el mundo a los empujones y con gente
de Central tirando todo tipo de cosas hacia los pasillos de salida obligatorios
(sic) para el público visitante, y la policía refugiada debajo del techo y
estorbando el paso”, se queja Francisco incrédulo de lo que le tocó vivir.
Por último, este socio de River (N° 2095432-3) remarca que
no es la primera vez que vive este tipo de situaciones en cancha de Central, ni
el maltrato constante de la policía rosarina: “El trato de la policía siempre
fue de mala manera, como si fuéramos delincuentes”. Francisco no sólo cree
responsables a los organismos de seguridad, sino que manda un mensaje directo a
la dirigencia riverplatense: “Responsabilizo a los dirigentes de River por la
mala negociación en cuanto a la cantidad de entradas y poco espacio que nos
brindaron ya que cuando equipos visitantes vienen al monumental reciben,
entradas, espacio, comodidad y seguridad y no sucede lo mismo cuando River
viaja al interior”.
Cabe destacar, que ayer la dirigencia de River Plate,
comandada por su Presidente, Daniel Passarella, decidió presentar la denuncia
correspondiente ante los organismos pertinentes por los incidentes que se
registraron el día sábado.
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